Al menos un muerto y 9 heridos por la explosión de un coche bomba en Colombia

Heridos por todos lados, casas destrozadas y llanto de las víctimas es lo que ha dejado el estallido de un coche bomba, este martes a las 4:45 pm en Vegalarga, corregimiento de Neiva, Huila, sur de Colombia.

El presidente Santos. | AP

Las mujeres lloran y buscan evacuar a sus hijos de los escombros. Las casas al alrededor están destruidas y las personas que han quedado vivas corren de un lado hacía otro en busca de salvarse. En el corregimiento no hay energía eléctrica, se camina a oscuras.

Los helicópteros pretenden llegar hasta la región distante de 45 minutos de Neiva, la ciudad más cercana, y evacuar a las personas que luchan contra la muerte. Mientras, por carretera, la prensa intenta penetrar la región donde supuestamente las FARC han protagonizado un nuevo atentado terrorista.

El bus de transporte municipal, cargado con explosivos y utilizado por la guerrilla para el ataque cubría la ruta Vegalarga Neiva y transitaba frente a la estación de Policía cuando se escuchó el estruendo que sacudió al poblado.

El conductor del coche, Ferley Mosquea Olaya, ha muerto. Los organismos de socorro no encuentran su cadáver en medio de las cenizas y las ruinas que ha dejado la explosión.

Se habla de 9 personas heridas, entre ellas, nueve uniformados de la Policía, uno de ellos, en grave estado de salud porque la bomba le ha destruido la mitad de su cuerpo. Los otros están fuera de peligro, reporta a EL MUNDO.es el médico Andrés Rubiano, quien recibió a las víctimas heridas. Los demás civiles gozan de buena salud.

Los policías heridos son Hugo Alejandro Montes, John Elkín Gutíerrez, Diego Omar Sánchez López, Gustavo Correa Patiño, Atalibt Alape Conde, John Alejandro Alvárez y Carlos Andrés Cuervo. La mujer cívil herida responde al nombre de Sara Reyes.

Heridos

"Tres policías tienen heridas de consideración, un paciente fue llevado a cirugía por un trauma abdominal abierta, otro por ortopedia por una fractura con esquirla en los miembros inferiores y uno más por un trauma craneoencefálico severo con una herida penetrante a nivel de cráneo por esquirla de la onda expansiva. El resto de pacientes tienen heridas múltiples en tejidos blandos, no revisten heridas de gravedad", agrega el galeno.

Mientras en la zona de la tragedia, los pocos policías que han quedado tratan de controlar que las FARC no repitan la acción terrorista y de calmar los nervios de un pueblo atemorizado, en el Hospital Hernando Moncaleano de Neiva el caos es total.

Familias enteras esperan partes médicos de sus parientes, lloran del susto y hasta hacen cadenas de oraciones para pedir por sus vidas. “Es horrible, no sé cómo pudo suceder esto. Cuando estalló la bomba corría desesperado, fui a buscar a mi esposa y me tropecé con gran cantidad de heridos, gente tendida en el suelo, en la carretera. Todos pedían auxilio y yo no sabía qué hacer”, narra a ELMUNDO.es José Domingo Mora, a quien los nervios parecen desestabilizarlo.

Repudio del Gobierno

El Ministro de Defensa, Rodrigo Rivera, rechazó el atentado terrorista de las FARC y dijo que la guerrilla camufló los artefactos en medio de un vehículo que recoge y transporta pasajeros diariamente.

“Uno de los cuerpos ha sido rescatado muerto y está irreconocible. Allí están los miembros de la Policía judicial haciendo los levantamientos de los cadáveres destrozados por la guerrilla”, informa preliminarmente el Ministro quien aún no tiene las identidades, ni el número exacto de los muertos porque en la zona es de noche, no hay energía eléctrica y hay gran cantidad de escombros.

“Es un hecho de cobardía, utilizar un carro de servicio público, interveredal, en una zona donde la gente utiliza estos carros”, contó Rivera, quien no duda que la responsabilidad recae alias ‘Rumba’, comandante del frente 17 de las FARC.

“Es una guerrilla afectada este año por parte del Ejército que ha penetrado sus guaridas y ha desmantelado campamentos y capturado insurgentes”, concluye el Ministro de Defensa, quien ofrece una recompensa para quienes ayuden a dar con el paradero de los responsables.

El Gobernador del Huila, Luis Jorge Sánchez García, ha rechazado la acción terrorista, los heridos buscan recuperarse, mientras Vegalarga trata de reponerse a la fuerza de un nuevo ataque de una guerrilla que le respira en los hombros.